miércoles, 21 de octubre de 2015

EDAD MEDIA: DESARROLLO DE LA ARQUITECTURA, EL ARTE Y LA PINTURA EN EL PERIODO: 

PALEOCRISTIANISMO

ARQUITECTURA: se realizó entre finales del siglo lll hasta el siglo Vl y nacida principalmente como una necesidad para la construcción de estructuras propias para la religión cristiana.
Aunque se originó en Siria y Egipto pasó rápidamente a Occidente y fue en Roma donde se produjeron las primeras manifestaciones de monumentos de arquitectura en los cementerios o catacumbas, dentro de una etapa de clandestinidad debido a las persecuciones de que eran objeto los que practicaban la religión cristiana. En esta misma época para celebrar las asambleas de culto religioso se utilizaron viviendas privadas, adaptándose algunas de sus salas para este fin.

Se distinguen dos etapas:

     ·         La persecución y clandestinidad con la utilización de las catacumbas.
   ·    El fortalecimiento del cristianismo como religión oficial, con la construcción de las basílicas.

Catacumbas
Cementerios excavados en las afueras de la ciudad, a los cuales se accedían por largos corredores con espacios en las paredes donde se superponían las sepulturas por una losa y en ella estaba escrito el nombre del difunto.


Entre las más principales tenemos.
Catacumba de San Calixto(siglo ll)
Catacumba Priscila












Catacumba de Santos Pedro 
       

Catacumba Vía Latina

Basílicas
Tienen origen en la tribunalicia romana, su forma va de una planta regular con varias naves, se la agrega un crucero que da origen al plano con forma de cruz. El ábside está reservado para los sacerdotes: el altar se halla en un punto de cruce las columnas que separan la nave principal de las laterales están unidas por arquitrabes o por arcadas. Las ceremonias se realizan en la nave principal y los fieles se sitúan en las naves laterales.
En la parte externa se encuentra
  • Un nártex o espacio donde se detienen los catecúmenos.
  • Un atrio o patrio rodeado por cuatro pórticos y en el centro una fuente que con el tiempo se transformará en bautisterio.

Entre las más principales tenemos 
Basílica Santa Sabina- Roma(siglo V D.C)
                    
Basílica San Pablo Extramuros
Basílica de San Juan Letrá       
                                    
Basílica Santa María La Mayor

ARTE: se desarrolla durante los seis primeros siglos de nuestra era, desde la aparición del cristianismo, durante la dominación romana, hasta la invasión de los pueblos bárbaros, en Occidente, Roma es el centro y símbolo de la cristiandad, por lo que en ella se producen las primeras manifestaciones artísticas de los primitivos paleocristianos, recibiendo un gran influjo del arte romano tanto en la arquitectura como en las artes figurativas. Lo mismo que la historia del cristianismo en sus primeros momentos, en el arte se distinguen dos etapas, separadas por la promulgación del Edicto de Milán por Constantino en el año 313, otorgando a los cristianos plenos derechos de manifestación pública de sus creencias.

PINTURA: Se desarrolló durante el Imperio romano, la pintura paleocristiana se extiende hasta el siglo VI en que comienza el estilo bizantino.
La pintura puramente decorativa se compone de motivos geométricos, de follaje y avecillas y geniecillos recordando a menudo las decoraciones pompeyanas del mejor gusto.
Dentro del período paleocristiano cabe mencionar en primer lugar los frescos de las catacumbas y desde la paz de Constantino sus composiciones al mosaico y también el fresco de las basílicas.Unas y otras ofrecen un altísimo valor por parte de la idea que envuelven aunque por su técnica y ejecución artística disten generalmente de ser modelos.


Mosaicos en la basílica de San Cosme y San Damián.

Orante de la catacumba de Priscila (Roma)
Orante de la catacumba de Priscila (Roma)

ANTECEDENTES HISTÓRICOS: EDAD MEDIA

  • La Edad Media o mejor conocido como Medioevo es el período histórico de la civilización occidental comprendido entre el siglo V y elXV .
  • Su comienzo se sitúa convencionalmente en el año 476 con la caída del Imperio Romano de Occidente y su fin en 1492 con el descubrimiento de América.
  • Se divide en dos grandes períodos:
  • Temprana o Alta Edad Media (siglo V a siglo X, sin una clara diferenciación con la Antigüedad Tardía)
  • Baja Edad Media (siglo XI a siglo XV),
  • A su vez puede dividirse en un periodo de plenitud, la Plena Edad Media (siglo XI al siglo XIII)
  • En la Edad Media surgieron nuevas formas políticas, que comienzan desde el califato islámico a los poderes universales de la cristiandad latina (Pontificado e Imperio) o el Imperio Bizantino y los reinos eslavos integrados en la cristiandad oriental (aculturación y evangelización de Cirilo y Metodio)
  • La Edad Media realizó una curiosa combinación entre la diversidad y la unidad.
  • La diversidad: fue el nacimiento de las principales naciones.
  • La unidad: procedía de la religión cristiana, que se impuso en todas partes; esta religión reconocía la distinción entre clérigos y laicos, por lo tanto se señalo el nacimiento de una sociedad laica.
  • Esto significa que la Edad Media fue el período en que apareció y se construyó Europa.




martes, 13 de octubre de 2015

LUIGI STORNAIOLO

BIOGRAFÍA Y PINTURAS DE LUIGI STORNAIOLO 
Luigi Stornaiolo Pimentel, pintor quiteño de amplia trayectoria, quien ha llevado sus trabajos a varios países del mundo. Es el ganador de Premio Eugenio Espejo en la categoría de Actividades Artísticas, galardón que el Gobierno Nacional, entrega a las figuras más representativas de la cultura ecuatoriana. “Toda su vida ha sido un crítico mordaz de esta sociedad fatua y vacía.
Nació en Quito en el año de 1956. Ha expuesto su obra en Ecuador, Australia, Argentina, Estados Unidos, Brasil, Perú, Italia. También ha participado en las Bienales de Venecia, Sao Paulo, Trujillo y Cuenca. Entre sus pinturas se destacan: ‘Baile como de amplio prestigio en el medio’, ‘Espectáculos energumenescos de gente ebria en noche plenilunada’,  ‘Streeptease en la mariscal’.
Luigi, cuenta que descubrió su amor por el arte desde niño, cuando su padre le regaló un libro de dibujo. “A los siete años me enfermé de gripe y tuve que guardar cama. Entonces mi padre me regaló un texto que se llama ‘Cómo dibujar’, para que no me aburra encerrado en mi cuarto. Así fue que empecé a dar mis primeros trazos. Todavía guardo el regalo que me hizo mi padre”.

Estudió arquitectura en la Universidad Central del Ecuador y de historia del arte en Europa. Su primera exposición individual la realizó en 1980, en Quito, en la Galería Club de Arte y la última en el 2011 en la sala ‘Juan Villafuerte’ del Ministerio de Cultura.

Los ochenta fueron sus años de apogeo. Pintaba alrededor de 18 horas días y su cuadros se vendían muy bien. “Llegué a realizar hasta 5 obras diarias que me dejaban una buena cantidad de plata, pude comprar dos casas y dos autos, todo iba de viento en popa”, cuenta.

La realidad cambió cuando el artista cumplió 40 años, pues fue víctima de una enfermedad degenerativa llamada arterosclerosis. “Los médicos me dictaminaron que con el tiempo no podría volver a pintar”, sostuvo Andrés Villalba, autor del texto ‘Luigi Stornaiolo, El arte de la digresión’. La noticia lo sumió en una profunda depresión y además empezó a sufrir la incapacidad de su mano derecha. Pasó varios años en el anonimato, encerrado en su mundo leyendo libros de arte, hasta que un día salió nuevamente a la luz.


 Pinturas

La  mayoría de sus obras se caracterizan por desmontar figuras icónicas y tener una crítica de la sociedad a través de la sátira. Este pintor ecuatoriano explota en sus lienzos contrastes cromáticos y utiliza la estética de lo grotesco, sin convencionalidades.
Las obras de Luigi han sido catalogadas como un neorrealismo social, sus cuadros transmiten una fuerza inimaginable, la mayoría de sus obras son en lienzos grandes.
En estas obras se puede presenciar la perspectiva urbana, la relación con la cuidad de Quito.
Sus primeras exposiciones; causaron gran conmoción por las imágenes plasmadas en los lienzos, imágenes cargadas de un fuerte expresionismo.



La muestra de Luigi Stornaiolo se inauguró en un nuevo espacio para el arte y la cultura en Quito que, generosamente, la Asociación de Funcionarios y Empleados del Servicio Exterior Ecuatoriano, AFESE, ha puesto a la disposición de la comunidad. Este espacio queda en la calle U. Páez y Roca y la exhibición estará abierta hasta el 14 de noviembre.

La obra de este brillante artista ecuatoriano, a quién considero un filósofo pesimista del Ser. Blasfemo y creyente, corrosivo y moralista, Stornaiolo convive, en la promiscuidad más absoluta, con todas sus personalidades. Su obra recorre un caleidoscopio de la infamia, grita su repugnancia, su aversión, su desprecio a una parte de lo que somos; entretanto, una explosión de fuerzas encontradas se entrechocan y se destruyen mutuamente. El ser humano, vencido en densas pesadillas de fango, en un efluvio corrupto, de pestilencia pegajosa y errática, no puede sino verse atrapado en la seducción de lo infecto. La escoria, engendros del azar y el hastío que desde un quinto piso apestan a cama trasnochada y a sudor obediente, llenos de perfidia y de lagañas, llenos de amargura, de pantomimas, desencajados y erráticos.




Su pintura perpetúa un diálogo con la humanidad y no renuncia hoy a su presencia ni a su actualidad. A pesar de sus arduas circunstancias vitales, Luigi continúa forzando a la naturaleza, exprimiéndole sentimientos, críticas y miedos. Es la lucha de la creatividad contra la nada.
La degradación de las ‘almas cariadas’, como diría Girondo, es una constante en la obra de Stornaiolo. En un clima de asfixia, una corriente corpórea de miembros sacude el lienzo y no nos deja impávidos, un hedor pegajoso y errante nos contamina con su efluvio corrupto. Esa agresividad ambivalente está cargada de una ironía moralizante, una ética religiosa que germina desde su infancia a través de su educación en un colegio católico. Es la náusea que siente por una parte de lo humano, esa dicotomía de lo que somos: una parte de nosotros es mirada como perteneciente a un mundo condenado a la perdición…el artista, en una especie de maniqueísmo, nos juzga y, al mismo tiempo, se juzga a sí mismo, a su parte más débil. Los personajes que representa son seres de una idiotez purulenta, de gestos leprosos que inspiran aversión y desprecio. En una palabra, cada cuadro incluye un dilema moral, un pesimismo sistemático que se cuela en casi todos los resquicios. El ser no es individual sino representa parte de una masa amorfa, amoral e irreverente.